Más conocimientos para mejorar la experiencia gastronómica en Tafí del Valle.
Desde el mes de julio del corriente año el Ente Tucumán Turismo inició la implementación del primer programa de Fortalecimiento Gastronómico en Tafí del Valle, que abarcó desde el diagnóstico con la técnica de Cliente Oculto (“Mistery Shopper”) realizado en cada uno de los establecimientos, hasta la teórica y la práctica que les permitió reafirmar los conocimientos.
El cierre del programa de Fortalecimiento Gastronómico tuvo lugar en el hotel Lunahuana, de Tafí del Valle, donde acudieron cocineros, personal gastronómico y propietarios de establecimientos. Fueron recibidos por la vicepresidenta del Ente Autárquico Tucumán Turismo (EATT), Elena Colombres Garmendia, a quien acompañaron personal de Capacitación y uno de los especialistas contratados por el Ente para este programa.
“Asumimos como un gran desafío el hacer acciones diferentes para obtener resultados distintos: la capacitación necesitó un replanteo de su formato tradicional: salir de lo áulico y con este programa nos encaminamos hacia el logro de ese objetivo”, manifestó Elena Colombres Garmendia, que enfatizó que el programa “excede lo gastronómico, porque se buscó generar identidad por medio de la gastronomía como experiencia turística y esos objetivos están cumplidos, además de haber integrado al Valle a través de los establecimientos, los chefs, los proveedores y el personal de contacto. Eso es lo más rico e importante”, concluyó.
“Nos sorprendió el entusiasmo de la gente y la continuidad. Ello habla bien de la identidad local ya que se busca que en el valle se creen y se puedan ofrecer productos con identidad propia, incorporando productores y nombres afines de platos nuevos para así poder llegar a través de la experiencia gastronómica al turista, y él a su vez transmitir lo que es realmente el valle, posibilitando a los asistentes al curso reforzar la idea de saber de dónde vienen, quienes son y porqué eligieron ser cocineros”, comentó Ana Laura Vásquez, jefa del área de Capacitación que impulsó el programa, quien además enfatizó el alcance y compromiso de los prestadores gastronómicos de Tafí del Valle al sostener que en el cierre “cuatro establecimientos consiguieron la distinción y 20 participaciones permanentes, con un 70% de clases prácticas”. Respecto a los planes en el corto plazo, expresó que aguarda que los resultados “se vean reflejados en el plato terminado y en el servicio para así poder avanzar desde allí hacia programas de calidad”, como así también replicar la experiencia – sin costo alguno para los interesados- en otras localidades turísticas de la provincia, con la intencionalidad de unificar criterios.
Los cuatro establecimientos distinguidos fueron “Estancia Las Carreras”; “Flor de Sauco”; “La Quebradita” y “El Portal de la Villa”, y veinte asistentes lograron acreditaron su participación a través de una certificación.
Rompiendo estructuras
La gerente general de Estancia Las Carreras, Inés Frías Silva, destacó: “El ente se animó a romper la estructura de las capacitaciones anteriores en las cuales el capacitador brinda su punto de vista y el otro escucha. Hubo una buena interacción entre el capacitador y la gente lo cual nos ha permitido hacer un relevamiento y revisión de cada uno de los puntos de la gastronomía. Fue muy bueno ver cuáles son las cosas que se pueden mejorar, en algunas ajustar y en otras innovar” y aseguró que “para poder innovar debemos seguir mostrando lo típico del lugar, resaltar con cada plato y cada cosa que se proponga en la carta lo que sacamos de nuestra propia tierra”, al tiempo que subrayó “Amaicha nos está trayendo sus condimentos y tenemos ingredientes orgánicos que dan un valor agregado a lo que estamos haciendo”.
Para Ricardo Svoboda, de Puro Campo, la capacitación “la capacitación era lo que nos faltaba para entender la cocina. Para nosotros todo resultó interesante, el dictado fue dinámico ya que fue muy bien planteado desde el punto de vista de la economía, materiales, personal y gerencia”.
Para el cierre cada participante presentó diferentes platos que elaboraron luego de los conocimientos adquiridos en el curso, entre los que sobresalió el rescate de la “ulpada”, una bebida nutritiva y refrescante preparada con harina de maíz capia cocida, azúcar y agua, que se enterraba en lugares que evitaban suba su temperatura, a la que se le incorporó para esta versión actual hielo, menta y limón con una variante de aguardiente para los adultos.
El programa de Fortalecimiento Gastronómico fue diseñado y ejecutado por el Ente Tucumán Turismo a través del área de Capacitación, con la participación del cocinero Álvaro Arismendi y el coach Fernando Farías.
