Sin embargo, la situación del sector hotelero varía: algunos establecimientos ya están ofreciendo precios para la temporada estival en dólares, mientras que otros aún no han definido sus tarifas para enero y febrero. En aquellos hoteles que han establecido precios en moneda nacional, el costo para hospedar a una familia tipo durante dos semanas comienza en 600 mil pesos, lo cual supone un alza del 300% en comparación con el año previo.
“Ante los vaivenes de la economía los precios varían constantemente tanto en costos como al público, lo que ha llevado en muchos casos a presentar tarifas en dólares a cotizaciones oficiales, MEP, o promedios, e incluso en algunos casos no hay tarifas”, explicó Diego Noia, empresario del sector y presidente de la Asociación Argentina de Ecoturismo y Turismo de Aventura (Aaetav).
“Realmente es un escenario económico complicado tanto para los consumidores como para los operadores”, agregó Noia. También aclaró que “esto se da en el mercado interno”, porque “los precios para los mercados externos normalmente se establecen con un año de anterioridad”.
El turismo extranjero fue el principal motor durante el año, ya que, si bien los residentes siguen siendo más del 70% del total, fueron bajando en comparación con el 2022. Según la última Encuesta de ocupación hotelera del Indec, salvo en mayo y junio, el turismo local cayó mes a mes si se lo compara con el mismo período del año anterior. En agosto, que son los últimos datos disponibles, los turistas locales fueron un 5,6% menos que en el año anterior.
La suba de mayo y junio coincidió con el PreViaje Cuatro, pero volvió a bajar en julio y agosto con respecto a esos meses de 2022. Los resultados de esta última edición del programa, que abarcaba viajes entre el 29 de septiembre y el 17 de octubre, probablemente se reflejen en las estadísticas futuras.
Por ahora, la demanda para temporada de verano “viene sostenida, pero no tan abrumadora para esta altura del año”, comentó Camilo Suárez, presidente de la Cámara de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires.
“Hay mucha prudencia tanto por parte de los empresarios para poner precios como del consumidor para contratar”. Por la inflación, la falta de precios de referencia y la incertidumbre sobre lo que pueda pasar con la economía del país, “se piensa de otra manera, se piensa un poquito más, se buscan más precios. Si bien nos pasa cada cuatro años, esta vez con mayor énfasis porque la inflación viene muy alta”, sostuvo.
Frente a esto los empresarios del sector aplicaron diferentes estrategias: algunos tratan de preservar el valor para atraer a los turistas locales y otros “calculan el precio según sus parámetros, no hay una tendencia general”, afirmó Suárez.
Según un relevamiento, para una familia tipo, en enero, las tarifas de un hotel en la Costa Atlántica arrancan en los 600 mil pesos por quincena, mientras el año pasado un alojamiento con las mismas características costaba $ 150 mil.
La expectativa de los empresarios está puesta en la próxima temporada y en la continuidad de PreViaje. “De nuestra parte valoramos la herramienta. En los fines de semana y en los períodos vacacionales en los que funcionó le dio un impulso muy fuerte al turismo”, afirmó a este medio Salvador Femenía, vocero de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). “Respecto a la próxima temporada creemos que pese a las dificultades está funcionando bien, porque tiene que ver también con la decisión de la gente de hacer un esfuerzo, inclusive postergando otros gastos”.
El turismo extranjero compensó la menor demanda de los viajeros locales. Durante el año, según cifras oficiales, tuvo un incremento sostenido. En febrero y marzo la cantidad de turistas internacionales aumentó respectivamente 232,7% y 134,2% en comparación con los mismos meses de 2022. En agosto, según los últimos números disponibles, el turismo internacional creció 37% en relación al mismo mes del año anterior.
En 2024 los empresarios esperan que este sector se comporte de manera similar. “Si se mantienen las actuales condiciones con el tipo de cambio, seguramente el turismo extranjero va a ser un factor determinante para que al menos la temporada desde el punto de vista económico sea exitosa”, concluyó Femenía.
En lo que respecta al turismo interno “hoy consideramos el PreViaje como una necesidad para el sector”, comentó a este medio Marcos Domínguez, presidente de la Cámara de Comercio, Turismo, Hotelería e Industria de Merlo, San Luis. “Es una herramienta que permite tener estabilidad, proyección e inversión”, sintetizó.
Lo cierto es que, para esta temporada, con PreViaje o sin él, los turistas locales deberán contar con un presupuesto hasta cuatro veces mayor que en 2022 si quieren vacacionar en la Argentina.