En los últimos años, esta ciudad del sur mendocino se consolidó como uno de los destinos más elegidos para pasar las vacaciones de verano. Confiados en su gastronomía, los paisajes, las bodegas, las actividades, la amplia oferta de servicios y sobre todo la calidez de su gente, los operadores locales nucleados en la Cámara de Turismo local ya palpitan lo que será una gran afluencia de turistas.
"Tenemos la suerte de ser un destino que se puede aprovechar en todas las temporadas; por eso, con nieve, con sol e incluso con días de lluvia, acá en San Rafael hay actividades para todos los gustos", asegura Gonzalo Tortosa, presidente de la Cámara de Turismo local. Algunas razones que justificarán ampliamente elegir a esta bella ciudad cuyana para descansar son las siguientes:
Excursión a Las Leñas
De día completo, en la cual se vivencia a pleno la Cordillera de los Andes y se disfruta toda la magia que regala en los meses de verano. Durante el recorrido el camino deleita con diversos paisajes, como las Salinas del Diamante, imponentes cerros y la majestuosidad de las montañas. Se visita la increíble Laguna de la Niña Encantada, como así también los Pozos de las Ánimas, lugares de inmensa belleza natural y de aguas claras. A la hora del almuerzo, nada mejor que degustar los inolvidables sándwiches de jamón crudo (con tomates secos, quesos, pastas, rúcula y aceite de oliva, entre otros productos) en “Jamón del Medio”. Una vez en el destino se puede recorrer el complejo, que cuenta con servicios e infraestructura para pasar esas horas disfrutando del lugar. Después de semejante jornada, a la vuelta lo mejor será descansar.
Visita a Villa 25 de Mayo y a Los Reyunos
En este recorrido haremos un viaje a través del tiempo, a pocos kilómetros, de la ciudad en la pintoresca Villa 25 de Mayo, se encuentra el Fuerte San Rafael del Diamante. Declarado Monumento Histórico Nacional, fue una de las últimas construcciones de la colonización española, y ha tenido un papel fundamental en la defensa del territorio con historias que vale la pena descubrir. Luego se llega a Los Reyunos, donde se encuentra la represa que contiene al Río Diamante, gracias a la cual se ha formado un lago artificial de una belleza y colores muy llamativos. Los cerros y rocas que no llegaron a taparse por completo por el agua, emergen mostrándose con curiosas y famosas figuras, como “La Ballena” o “El Elefante”. Todo esto se puede visitar con las lanchas que hacen salidas de manera permanente y que son algo imperdible para grandes y chicos. Los más aventureros tendrán una posibilidad única de hacer tirobangi atravesando el lago, una emoción única para los que aman la adrenalina. A la vuelta se puede pasar por alguna de las muchas casas de productos regionales que hay en el camino, siendo “El Secreto” una de las más visitadas por sus famosos alfajores.
Bodegas, viñedos, olivares y restaurantes boutique
Reconocida por sus vinos, las visitas a las bodegas son casi obligatorias en San Rafael. Algunas renombradas mundialmente como Bianchi, otras más locales como Finca El Nevado o Ibarra (donde también se pueden comer platos gourmet de primera calidad), pero todas ellas con atención esmerada y ganas de mostrar lo suyo a quien quiera aprender sobre este apasionante mundo. San Rafael además ofrece una variada y amplia oferta gastronómica. Básicamente hay de todo, desde paradores para comer rápido y barato hasta restaurantes en el centro de la ciudad (recomendada la trucha al roquefort de “Tienda del Sol”); o bien siguiendo la última tendencia, comer “puertas adentro” (claro ejemplo de esto último es “L’Obrador”, un lugar recomendado para ir con apetito).
Parque Aventura
A pocos kilómetros de San Rafael, y recientemente inaugurado, seguramente se convertirá en un lugar de peregrinación para los amantes de la adrenalina. Los puentes suspendidos, tirolesas, rappel y otras actividades de aventura no defraudan al visitante. Antes o después, se impone un chapuzón en la espectacular piscina a la vera del cerro, y finalmente las reposeras invitarán a un descanso al sol o a la sombra.
El Nihuil, Cañón del Atuel… ¡y rafting!
Tal vez sean las bellezas más conocidas de San Rafael, ya que cualquiera que la haya hecho recomendará la excursión. La primera parada se hará en El Nihuil, lugar donde se disfrutar de las playas y bañarse en el agua clara y cristalina; y por supuesto, comer algo para empezar a recorrer el circuito del Cañón. Dentro del mismo se va observando todo el aprovechamiento hidroeléctrico de las aguas del Río Atuel, con sus tres centrales y sus respectivas represas. Además, las paredes del Cañón –a veces de con más de 130 metros de alto- nos muestran diferentes geoformas para divertirse y buscarle similitudes a personajes, objetos o animales. Finalizado el circuito, nos deslumbra el lago de Valle Grande, con la central hidroeléctrica nº 4 al pie del dique, y luego llega la hora del infaltable rafting. Cabe destacar que no es peligroso y que cualquiera puede hacerlo, siempre que cuenten con la habilitación correspondiente (“Raffeish” es una de las recomendadas por atención y precio).
La Ciudad
Si de museos se trata, el Museo Histórico Militar también es una parada obligatoria para conocer más acerca de los orígenes de San Rafael, al igual que el Museo Municipal Ferroviario, ubicado en la ex estación ferroviaria, donde se encuentra además la primera locomotora que llegó a la ciudad a principios del siglo pasado y generó un crecimiento comercial y poblacional que modelaron a la zona como la conocemos hoy. La plaza San Martín (en pleno centro de la ciudad) y la Plaza Francia y Parque de los Niños, son paseos obligados de las nochecitas sanrafaelinas, donde se puede respirar la esencia de los lugareños. Otro punto imperdible, a muy pocos kilómetros del centro, es el Laberinto de Borges, una joya que hay que ver y en la cual vale la pena perderse y encontrarse.
Servicios para todos los públicos
Desde hoteles boutique hasta grandes y cómodos 4 estrellas con todos los servicios para los más exigentes (Vecchia Terra o Tower entre los más conocidos), u hoteles familiares céntricos (Patios del Mediterráneo se destaca en su relación precio-calidad), hasta más económicos de una o dos estrellas. También hay cabañas, apart hotel, hostels, campings, es decir, es variada y para todos los bolsillos la propuesta de alojamiento).
Por todo esto y por mucho más, en San Rafael se espera con muchas expectativas la temporada: "Somos optimistas y sin dudas será un gran verano", destaca el operador local Jorge Royon, titular de Millanti Viajes, y agrega a modo de consejo respecto de su rubro que “es importante que el visitante se contacte con agencias de viajes habilitadas, ya que muchas veces de eso depende el éxito o el fracaso de las vacaciones".
Cómo llegar: San Rafael tiene excelentes accesos y rutas en buen estado. Además, la ciudad cuenta con un aeropuerto para vuelos de cabotaje, con vuelos regulares desde Buenos Aires. También se puede acceder por vía terrestre, utilizando las Rutas Nacionales Nº 40, 143 o 146, según el punto del país desde donde se provenga. Todos los accesos son buenos, con servicios y buen estado general de las rutas.