Llama la atención el hecho de que el turismo como industria no aparece salvo honrosas excepciones en las campañas electorales. La cartera habitualmente relegada a un rubro menor es hoy la solución más inmediata al problema macroeconómico de la Argentina.
El turismo genera dólares de tal forma de que es el cuarto complejo exportador detrás del agro, la minería y los hidrocarburos. Pero a diferencia de estos otros complejos exportadores genera muchísimo mas empleo. Dicho esto es lo que llama la atención, con semejantes variables el tema esta ausente, o bien escasamente presente.
Entre las excepciones podemos mencionar al equipo de Patricia Bullrich que hizo una presentación de su equipo y plan estratégico que lidera Hernan Lombardi, ex ministro y gran conocedor del tema. Los gobernadores de Salta, Corrientes, Jujuy y Córdoba han hablado bastante al respecto y luego algunos intendentes. Cierto es que algunos candidatos han dicho cosas aisladas como por ejemplo Cornejo.
Pero en lineas generales y en comparación al resto de las áreas de un gabinete el tema esta ausente en la prensa y en la conversación pública. Argentina recibe aproximadamente cinco millones de turistas extranjeros por año, teniendo en cuenta que México recibe 45 millones de turistas extranjeros por año. Cierto es que no contamos con la ubicación estratégica del país azteca, pero tampoco nos podemos quedar con las cifras actuales que debieran ser cuanto menos el doble.
La industria turística puede desempeñar un papel importante en la solución de problemas macroeconómicos en Argentina. Si se gestiona de manera efectiva, puede contribuir al crecimiento económico, la generación de empleo en todo el país, el aumento de las exportaciones vía ingreso de dólares con la consecuente mejora de la balanza de pagos.
Para mencionar y refrescar algunas formas en que la industria turística puede ayudar a abordar los problemas macroeconómicos en Argentina hago una lista suscinta que de obvio cae de madura.
1. Generación de Ingresos: El turismo aporta divisas al país a través de la llegada de turistas extranjeros que gastan dinero en alojamiento, comida, transporte y actividades. Estos ingresos pueden ayudar a fortalecer la balanza de pagos y reducir la dependencia de Argentina de las divisas extranjeras. Así sin más con los correctos incentivos es dinero fresco que ingresa a las arcas públicas mucho más rápido que el agro o la minería.
2. Creación de Empleo: La industria turística es intensiva en mano de obra, lo que significa que puede generar una gran cantidad de empleos en hoteles, restaurantes, agencias de viajes, guías turísticos y más ayudando en consecuencia a reducir la tasa de desempleo y mejorar la situación económica de la población. Muchos con soltura critican que es mano de obra poco calificada. Acaso Argentina tiene entre su inmensa cantidad de desocupados algún tipo de calificación laboral de alta complejidad?
3. Desarrollo de Infraestructura: Para atraer a los turistas, es necesario desarrollar y mantener infraestructuras como carreteras, aeropuertos, puertos y servicios públicos. Esta inversión en infraestructura también beneficia a otras industrias y a la calidad de vida de los residentes locales, dando a conocer en la práctica el famoso derrame del turismo.
4. Promoción de Exportaciones: La industria turística no solo atrae turistas extranjeros, sino que también puede promover la exportación de bienes y servicios relacionados con el turismo, como artesanías, alimentos y bebidas locales, y servicios de transporte.
5. Diversificación Económica: Depender en gran medida de una o unas pocas industrias puede ser riesgoso desde el punto de vista económico, tal es así que una sequía puede reventar la economía argentina. La industria turística ayuda a diversificar la economía, reduciendo la vulnerabilidad a las fluctuaciones en los precios de las materias primas u otros factores externos.
6. Mejora de la Imagen del País: Una industria turística exitosa puede mejorar la imagen de Argentina en el extranjero, atrayendo no solo a turistas, sino también a inversionistas y socios comerciales.
Sin embargo, es importante destacar que el éxito de la industria turística depende de una gestión eficiente y sostenible. Sobre todo profesional. Esto incluye la inversión en la capacitación de la fuerza laboral, la conservación de recursos naturales y culturales, la promoción efectiva en mercados internacionales y la creación de un entorno favorable para los negocios.
Además, la estabilidad política y económica es fundamental para atraer turistas y fomentar la inversión en el sector. Los desafíos como la inflación, la deuda pública y la volatilidad cambiaria deben abordarse para que la industria turística pueda alcanzar su pleno potencial como motor de crecimiento económico en Argentina.
Ojalá alguien recoja el guante.