A Salón repleto se transitó el primer fin de semana en la 34º Fiesta del Chocolate Alpino que se traduce en una amplia convocatoria turística gracias a la variada propuesta de actividades y entretenimientos, que se suman a la oferta gastronómica.
Se dio inicio a las vacaciones de invierno con excelentes expectativas para lo que será el mes de julio en Villa General Belgrano.
“El sábado desde bien temprano ya se presenciaba en nuestras calles una fuerte afluencia turística procedentes de Santa Fe, Buenos Aires, y Córdoba principalmente” indicó Pablo Sgubini, Secretario de Turismo de la Villa. El índice de ocupación hotelero ascendió al 90.24% que se pudo ratificar luego de realizar la estadística oficial consultando a la mayoría de los establecimientos.
El Salón Alpino abrió sus puertas a las 11 horas del Sábado 7 y enseñó su renovada estética mediante nueva decoración y cinco aberturas que conceden mayor luminosidad natural. Hacia el ala sur, un deck con floridos canteros permitió degustar al aire libre de las exquisiteces que forman parte de los festejos.
Dentro de las novedades de la fiesta se destaca la producción artesanal de chocolate representada por ocho productores que fortalecen el “Camino de la Dulzura” y enseñan una variedad de productos que hacen de la fiesta un verdadero emblema de la repostería y la chocolatería centroeuropea. Inclusive, se presentó por primera vez, una Fabrica de Chocolate en vivo con un stand donde se apreciaron dos templadoras y se elaboraron distintos tipos de manjares “a la vista”.
La algarabía infantil tiñó el Salón Alpino convirtiéndolo, en horas de la tarde, en un sinnúmero de sonrisas y aplausos. Los destacados espectáculos con payasos, teatralizaciones, e interacción con los menores generaron sorpresa y diversión asegurada en el denominado “Willkommen Kinder”, un espacio que ofrece la bienvenida a las familias y a los niños en particular.
Las orquestas típicas, mediante su repertorio centroeuropeo, invitaron al público a bailar los famosos y alegres ritmos mientras se aguardaba la tradicional ceremonia de la “Fondue de Chocolate”: pinches con frutas frescas bañadas en el más delicioso chocolate ofrecido por aldeanos que desfilaron con sus vistosos trajes.
Si bien la Fiesta del Chocolate Alpino se convierte en eje de estas Divertidas Vacaciones, se destaca también la inauguración en la “Casa del Bicentenario” de una muestra de esculturas en hierro y platería, como así también de Pinturas, Mosaicos y Fotografías de artistas regionales.
El clima festivo, la alegría de la gente, el entusiasmo de los pequeños, y el aroma del chocolate en el aire transformaron estas dos jornadas iniciales en un verdadero éxito que ofician de promesa para todo lo que Villa General Belgrano puede ofrecer a quienes la elijan como destino turístico.
