Bajo la dirección de su compañera Guadalupe Bervih, el actor se mete en la piel del artista Enrique Santos Discépolo, a quien describe como "difícil de atrapar, no lo podíamos encuadrar, quizás porque es una personalidad de muchas facetas".
Bajo la dirección de su compañera Guadalupe Bervih, el actor se mete en la piel del artista Enrique Santos Discépolo, a quien describe como "difícil de atrapar, no lo podíamos encuadrar, quizás porque es una personalidad de muchas facetas".