Latam Argentina con nuevos desafíos para hacer frente a la crisis del transporte aéreo post pandemia del covid -19.
El mundo se vio paralizado después de darse a conocer el brote del covid-19
en China, y en poco tiempo a nivel planetario. Dicha parálisis arremetió contra el mercado aéreo, obligando a muchas líneas aéreas a queda en situación de quiebra. Las que aún siguen sobreviviendo, logran mantener a flote sus compañías mediante la disminución salvaje de sus gastos, frente a la imposibilidad de continuar con sus operaciones y no recibir financiamiento externo para mantener en pie toda su estructura. Es una estrategia desesperada, de corto plazo, que solo encuentra justificación en la gravedad de la situación que atraviesa esta industria.
No así es el caso de LATAM, compañía que surgió de la fusión de la chilena LAN y la brasileña TAM. Su filial de cabotaje en argentina, que desarrolla vuelos comerciales y transporte de carga, ha reducido sus vuelos y operaciones en un 95% a causa del decreto instaurado por el Gobierno Nacional, en línea con muchos otros países del mundo, con fecha 19 de marzo del corriente año. Esta restricción a la circulación de personas, instaurado de forma repentina, tomó por sorpresa a muchos pasajeros que se encontraban fuera de sus lugares de residencia. Desde la empresa, a partir de esta situación se concentraron en calcular la cantidad de personas varadas, estimando una asombrosa suma de alrededor de 10.000 pasajeros, con el fin de solicitar una disposición para que puedan retornar a sus hogares y cumplir el aislamiento social, preventivo y obligatorio que dispuso el gobierno. Este era el modo más eficaz de hacerlo, ya que algunas provincias habían cerrado sus fronteras o limitado la circulación entre provincias, imposibilitando el retorno por la vía terrestre.
La crisis golpea a toda la industria aeronáutica, pero no a todos los sectores
por igual. Por mencionar un ejemplo, los fabricantes de aeronaves han logrado retomar las actividades en sus instalaciones. El transporte aéreo comercial se ha convertido en el más perjudicado por las restricciones mencionadas. El cierre de fronteras les impide operar, y los pocos vuelos permitidos con fines de repatriación, especiales o sanitarios, mayoritariamente quedan en manos de otro gran jugador del mercado. Por suerte, aun así, ha sido participe en las campañas de vuelos humanitarios.
Gran diferencia con nuestros vecinos, eternos objetos de comparación por la
fuerte presencia regional de los mismos. En Brasil y Chile están habilitados los vuelos de cabotaje, con restricciones en función de las necesidades y las demandas, pero no se vieron paralizadas sus operaciones logrando mantener a flote la continuidad de LATAM en dichos mercados. Igualmente, en los tres países han recortado el 50% de los salarios de sus empleados para lograr equilibrar las cuentas en los primeros meses de la pandemia y además a causa de la crisis que vive la aerolínea, la misma se vio obligada a despedir a unos 1.400 trabajadores entre las filiales de Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
El impacto también llegó al transporte de cargas, donde la empresa tiene
una fuerte presencia debido a que LATAM CARGO es responsable de la exportación de animales y fármacos, e importación de maquinarias industriales, autopartes, fármacos y más, abasteciendo de productos al mercado local para palear la difícil situación económica. Reflotando esta actividad en el futuro cercano, podría dar sustento a todo el grupo, expandiendo nuevos desarrollos y aumentando su presencia, para sanear las cuentas de la empresa.
LATAM Y SU CONVENIO CON DELTA
La empresa americana delta que tiene el 20% de las acciones de Latam, debido a la fusión de ambas empresas para ser una de las empresas más fuertes de la industria aerocomercial y poder hacerles frente a otras empresas en los destinos internacionales, ambas buscan una solución en forma conjunta para atraer de nuevo la confianza al mundo aeronáutico a los pasajeros a causa del covid tomando las medidas pertinentes de prevención a bordo, las cuales se pueden mencionar a continuación:
Precauciones a bordo:
Embarque y desembarque: implementación de mejoras en los procesos de embarque y desembarque para evitar conglomeraciones.
Asiento vacío: Siempre que sea posible dejaran libre el asiento del medio para promover la distancia entre pasajeros.
Sistemas de ventilación: los aviones cuentan con un sistema de recirculación de aire del avión cada 3 minutos gracias a los filtros HEPAL(high eficiency particulate air), que remueven el 99,97%de las partículas.
Higiene en cabina: definimos procedimientos de limpieza proactivos y periódicos en toda la cabina además disponibilidad de alcohol en gel en todos sus aviones.
Protocolo de tripulación: Ajuste de protocolo de tripulación para minimizar las interacciones he incluir mascarillas para la tripulación y los pasajeros.
Recomendaciones: solo las personas que viajen se acerquen al counter de check- in, entre 1 hora y treinta minutos y anticipación, check- in online, boarding pass digital, una vez dentro del avión permanecer en sus asientos y evitar desplazarse por la cabina.
Todas estas medidas son tomadas con el fin de evitar que se produzcan contagios y poder mitigarlos de la mejor manera cuando el pasajero ingresa al aeropuerto para hacer el check –in y y en la espera para abordar, como así también una vez estando a bordo del avión durante la realización del vuelo, para que el pasajero se sienta seguro al momento de viajar a su destino elegido.