“La Malbequería…  el nombre no deja dudas de lo que podemos hallar en esta propuesta gastronómica palermitana,  pero el plus es la invitación a cómo disfrutar  y potenciar la experiencia.

Por Candelaria Lighezzolo, sommelier

Vinoteca en la entrada, wine bar y parrilla restaurant “Lo de Jesus” -vecino y socio- comparten una carta donde los vinos son el lujo y el malbec la estrella.

En lo personal y para todo aquel que le apasione el mundo del vino, las degustaciones son un compromiso inexcusable. ¿Por qué?...primero porque están dirigidas por unos de sus dueños, Juan Argerich -enólogo, ingeniero agrónomo y de tradición familiar vitivinícola- un apasionado de su legado,  fiel devoto de la vid y su coyuntura, la voz que todos queremos escuchar cuando se habla de las entrañas de esta bebida; segundo y tercero y cuarto… porque la selección para las catas vienen también de autores atrevidos, terroirs privilegiados y apuestas jugadas.

Nuestra experiencia comenzó con vinos del NOA. Un sommelier, 5 etiquetas y dos bodegas - Bad Brothers y Fernando Dupont – recorriendo en su expresión los Valles Calchaquíes desde Catamarca, La Rioja, Tucumán y las mayores alturas de Salta, hasta la Quebrada de Humahuaca. Finalizamos con una cena en el patio –menú Lo de Jesús- con parrilla y los clásicos que más nos gustan y jamás perecen.

Me gustó ver la carta y advertir que los vinos son elegidos a gusto personal de su mentor, porque les gusta. Exclusivos, de vanguardia, los mejores íconos, todos dignos y detalladamente pensados (desde $158).

La Malbequería propone degustaciones cada semana, arte, música y en estreno otro interesante maridaje, cine y vino.

El lugar se presta a una agradable predisposición, luz natural, jardín y plantas que nos distienden de forma espontánea, al igual que su atención. Y en resumen (detalle no menor) invita también a nuestra mejor unión, infalibles y placenteras  insignias argentinas, ASADO Y MALBEC.

La Malbequería: Gurruchaga 1418