La aerolínea nacional francesa Air France ha decidido suspender sus vuelos a las capitales de Níger (Niamey), Burkina Faso (Uagadugú) y Malí (Bamako), informó el canal BFMTV, citando a representantes de la empresa.
Según el medio, los vuelos a Niamey están suspendidos hasta nuevo aviso, mientras que los vuelos a Uagadugú y Bamako están cancelados hasta el 11 de agosto.
La aerolínea también aclaró que, debido al cierre del espacio aéreo sobre Níger, se ve obligada a revisar sus planes de vuelo, lo que aumentará la duración del viaje a varios países africanos hasta en dos horas adicionales.
Los Gobiernos de Burkina Faso y Malí, en un comunicado del 31 de julio, expresaron su solidaridad con el pueblo de Níger y condenaron la imposición de sanciones por parte de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) contra Niamey, afirmando que tales medidas sólo "exacerban el sufrimiento del pueblo y ponen en peligro el espíritu de panafricanismo." Ambos países advirtieron que considerarían cualquier intervención militar en Níger como una declaración de guerra contra los tres países.
El 26 de julio un grupo de militares rebeldes anunció la destitución de Mohamed Bazoum como presidente de Níger, el cierre de las fronteras del país, la imposición de un toque de queda, la suspensión de la Constitución y la prohibición de la actividad política de los partidos. El 28 de julio, los insurgentes anunciaron que el general Abdourahmane Tchiani se convirtió en jefe de Estado. En el momento del golpe, dirigía la Guardia Presidencial, cuyas unidades detuvieron y siguen reteniendo a Bazoum y a su familia. El presidente, según los políticos nigerianos, se encuentra "en buen estado de salud" y habla por teléfono con dirigentes y representantes gubernamentales de otros países, pero no se le permite salir de su residencia.
En una cumbre de emergencia celebrada el 30 de julio, los líderes de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental exigieron que los rebeldes que habían tomado el poder en Níger liberaran y restituyeran inmediatamente a Mohamed Bazoum como presidente y restablecieran el orden constitucional en el país. La comunidad amenazó con tomar medidas contra los rebeldes y no descartó el "uso de la fuerza".