De acuerdo a un informe del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEAXXI), el efecto del Covid-19 sobre el mercado de trabajo afectó principalmente a los sectores relacionados con el turismo, tal como el sector hoteles y restaurantes.
Según el informe, en el mes de abril el empleo registrado del sector privado se incrementó un 1% respecto al mismo mes del año anterior, mientras que la evolución del mismo indicador para el sector hoteles y restaurantes muestra una contracción del 13,2%. Esto indica que en términos de puestos de trabajo, en el mes de abril hubo en el sector privado registrado 5.895 mil asalariados, de los cuales 209 mil correspondieron al sector bajo estudio, equivalente al 3,5% de los asalariados de la economía.
Sin embargo, esta información si bien nos muestra una “foto”, no nos da mucha información sobre la “película”. De acuerdo al siguiente gráfico, comenzando desde 2015, se observa que desde junio de 2018, la economía entró en terreno negativo en cuanto a los asalariados registrados, ya que se muestra una continua contracción interanual, la cual recién solo subió un 1% i.a. en marzo de este año por la baja base de comparación.
La máxima caída se anotó en el mes de mayo de 2020, cuando el total se contrajo un 5,1% respecto al mismo mes del año anterior, pero luego, las prohibiciones de despidos y la doble indemnización frenaron la destrucción de empleo, por lo que entre marzo de 2020 y abril de 2021 encontramos 100 mil asalariados privados registrados menos.
En tanto, cuando se analiza estrictamente el sector de hoteles y restaurantes se observa una fuerte caída a partir de marzo de 2020, mes en el que la economía comenzó con restricciones en el contexto de pandemia.
La mayor contracción en términos de variación interanual se verificó en febrero de 2021, mes en el que los asalariados del sector se contrajeron un 21,5%. Esto, implicó una caída de más de 55 mil asalariados, lo que muestra que más de la mitad de la contracción fue explicada por este sector.
Debido a la dinámica analizada, antes de la pandemia el sector hotelería y turismo empleaba al 4,6% de los asalariados registrados, mientras que a abril de este año se perdió la participación en 1 punto porcentual, ubicándose en el valor más bajo de la serie, y la tendencia continua a la baja.
En términos de ingresos, al igual que cuando se analiza el empleo, se observa una fuerte contracción de las remuneraciones en términos reales, lo que implica una caída del poder de compra de los salarios.
Analizando la economía en su conjunto, se observa una dinámica negativa del poder de compra de los salarios, los cuales estaban disminuyendo sus resultados negativos justo previo al comienzo de las restricciones de la pandemia.
Como producto de las prohibiciones de los despidos, al no poder ajustar el mercado de trabajo por cantidades, lo hizo por precios, incrementándose los salarios nominales muy por debajo de la inflación.
De esta forma, las remuneraciones por todo concepto de la economía se ubicaron en marzo de este año en el promedio de $85.979, con una suba del 38,9% respecto al mismo mes del año anterior, lo que implica una caída del poder de compra del 9,1% en la serie original y un 10,5% en la desestacionalizada.
En tanto, cuando se analiza el sector de hoteles y restaurantes el resultado, al igual que cuando analizamos el empleo, muestra peores resultados: las remuneraciones promedio del sector se ubicaron en marzo en $41.208, menos de la mitad (47,9%) de la remuneración de la economía.
El incremento de los salarios nominales fue del 32,8%, muy por debajo de la inflación, lo que implicó una caída de los salarios reales del 13,2% en la serie original y 21,1% desestacionalizada.
Para finalizar, el informe de CEEAXXI plantea que si bien el desempeño ha sido devastador para la economía toda (sumada a la pésima gestión sanitaria que nos dejó ya más de 100 mil muertos), cuando analizamos hotelería y restaurantes los resultados empeoran notablemente, con el agravante que las restricciones que han comenzado a flexibilizarse en varias actividades, aquí aun tienen un largo trayecto por delante antes de volver a la normalidad.