La bodega de raíces italianas más famosa de la Argentina este año celebró con 90 velitas. No es cualquier año, se cumple una década más, cuarta generación de inmigrantes y merece, como mandan sus costumbres, preparar el mantel, llenarlo de cosas ricas y brindar en “famiglia” y con amigos -muchos por supuesto-.

Por Candelaria Lighezzolo, sommelier.

Sobre la mesa, a lo largo del año hubo novedades. Nuevos vinos, nuevas tierras y lo último para ir cerrando 2018 y sus festejos, los recién sacados de la bodega Famiglia Bianchi White y Red Blend.

Dos vinos gestados con la intención de atraer a millenials y que los nuevos consumidores comiencen un recorrido hacia los top of the line. Vinos jóvenes, ni concentrados ni que necesiten ser traducidos, trivarietales de distintas zonas de San Rafael con filosofía tana y los mismos valores en cada botella.

FAMIGLIA BIANCHI WHITE BLEND

Blend de Chardonnay, reina de las blancas y de la zona; Viognier, varietal versátil que nunca resta y Moscato Bianco, la innovación. Frutado, suelto y prolijo, me gustó mucho que se sintiera untuoso y si hablamos de descriptores, manzana verde, durazno, flores y sospechas minerales. Un estilo que busco para estos aires de estación con avisos de verano, terrazas y comidas ligeras.

FAMIGLIA BIANCHI RED BLEND

Aquí sin perder el perfil de la propuesta, lo nuevo tiene un corte clásico. Cabernet Sauvignon, variedad insignia de San Rafael, Merlot y Malbec.

Y no necesita subtitulos, lo disfruté clásico y elegante, frutado… y me gustó. MIsión cumplida para este tinto!

Comencemos a recorrer el camino entonces, vinos eslabón entre premium y alta gama, con estilo nuevo y secretos de toda la vida. Feliz cumple -otra vez- un placer brindar con sus cosechas!