En plena pandemia Rodrigo López Vigil (46 años) decidió reinventarse. La decisión no fue fácil. Llevó noches y días tomarla. Y varias otras reponerse del golpe anímico de dejar atrás 17 años de historia al frente de Tícaro resto bar ubicado en pleno corazón porteño.
Ese reducto gastronómico, que inauguró junto a su padre cuando apenas tenía 27 años, supo conquistar el corazón y la panza de ejecutivos, oficinistas, turistas, asiduos al Luna Park y transeúntes que se sentaban en sus mesas a degustar las delicias que allí se elaboraban.

En pleno aislamiento social obligatorio junto a su esposa Romina, se animaron a hacer realidad el sueño de abrir las puertas de una fiambrería gourmet.
Algunos viajes al viejo continente, innumerable cantidad de tapas ingeridas en España y, por supuesto, los fiambres españoles pesaron a la hora de crear Salvatore Salumería.
Esta vez el escenario era otro: el Corredor Bancalari, en la zona norte de Buenos Aires. La propuesta variaba bastante de la experiencia de antaño, pero las ganas y la pasión estaban renovadas.
Así hicieron frente a los obstáculos y el virus que impedía todo, menos comer…

El pasado 18 de noviembre de 2020, Salvatore Salumería, inspirados en la admiración que sienten por el pintor Salvador Dalí, y haciéndole honor al hijo de la pareja emprendedora, Rodrigo recibió por primera vez clientes en el local 8 del centro comercial Euskal Herria Plaza.

Por entonces había fiambres y queso exhibiéndose en las heladeras, pero lentamente las delicadas estanterías de madera se fueron copando por productos gourmet hechos en Argentina y otros rincones del mundo.
El objetivo de estos emprendedores es claro: ¡acercar productos de calidad a las mesas de los vecinos de la zona norte!

¡Imposible no tentarse!

Al consultarle al propietario acerca de los imperdibles que deben estar en nuestra mesa, sin dudas, responde: “el jamón crudo reserva y el tipo Parma, las olivas catamarqueñas, los clásicos patés elaborados siguiendo una estricta receta alemana y los quesos de Tandil y Suipacha”.

La variedad de piezas gastronómicas que comercializan y la atención personalizada son las protagonistas de este reducto donde resulta imposible no tentarse. Quesos y fiambres no son una novedad, pero sí los dips, las salsas, los higos mendocinos rellenos con nueces, los chocolates con vino, las conservas y la lista continúa creciendo, día tras día.
Entre su oferta no faltan opciones libres de TACC, orgánicas y veganas.

Salvatore Salumería abre de Lunes a Domingo. Se pueden degustar en el patio al aire libre las picadas y los sándwiches gourmet con unas cervezas artesanales bien heladas o, la opción para quienes tienen que seguir con la rutina o no ingieren alcohol: gaseosas.

Por el momento sólo ofrecen servicio de Take Away, pero por tu seguridad sanitaria o si no te gusta esperar podés realizar tu pedido con anticipación vía whatsapp al 112260-6007.